Históricamente, la Kabbalah ha sido una enseñanza secreta estudiada sólo por unos pocos individuos seleccionados en cada generación. Siempre ha habido mucha controversia alrededor de la enseñanza de esta sabiduría, especialmente cuando unos Kabbalistas intentaron abrirla a un público más amplio.
A lo largo de los últimos miles de años, los kabbalistas han sido perseguidos por atreverse a enseñar estos secretos a las masas.
Todavía hoy, mientras el Centro de Kabbalah continúa abriendo su sabiduría a todo aquel que quiera estudiarla, todavía existen aquellos que creen que si eres una mujer, un cristiano o no lo suficientemente sagrado no debes tener acceso a la Kabbalah. Sin embargo, el Centro de Kabbalah continúa firme en su postura, abriendo las puertas de esta sabiduría a todos, sin importar género, religión o edad. A pesar de que esta postura sigue trayendo controversia a las puertas del Centro, nosotros continuaremos nuestra misión.